Hola Marcelo, mi nombre es Federico y soy un ávido lector de la
polémica desatada por Vicentini en estas listas. También me interesa el
cuadro psicológico que le asigna a Vicentini pero, como ya pasó otras
veces durante la polémica, creo que desvía un poco la discusión. Él lo
acusa de robar un subsidio para el desarrollo de UBASOFT. Pego al fondo
de este mail el mensaje original al que hago referencia. ¿Nos podría
contar en qué se equivoca Vicentini? ¿Cuál es el estado actual del proyecto UBASOFT?<br>
<br>saludos,<br>Federico<br><br>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>><br>
<br>Mail de Vicentini:<br><div><br>Estimado Dr Aliaga:<br>
<br>
Le adjunto 2 archivos referentes a un proyecto llamado <span>UBASOFT</span> del<br>
director de computación - en ese entonces Marcelo <span>Frias</span> – para el cual le<br>
concedieron un subsidio de $ 100.000. En este proyecto el director se<br>
comprometía a desarrollar programas para toda las existentes, futuras e<br>
imaginadas áreas de la ciencia de la computacion. En particular para una<br>
llamada optimizacion combinatoria. Esta es mi especialidad en donde yo<br>
empece hace 50 años cuando la disciplina nació. Los algoritmos de<br>
optimizacion combinatoria no son generalizables sino que se adaptan a cada<br>
problema particular usando un principio llamado de optimalidad. Si M.<br>
<span>Frias</span> me hubiera pedido opinion de esta parte de su proyecto yo le hubiera<br>
dicho que no tenía sentido.<br>
<br>
Denuncio que este proyecto “estratégico” del dpto de computacion fue una<br>
truchada que terminó con que el mismo se esfumara “in the blue sky”.</div><br>(...)<br><br>Fabio Vicentini<br><br><div class="gmail_quote">2009/9/13 <span dir="ltr"><<a href="mailto:mfrias@dc.uba.ar" target="_blank">mfrias@dc.uba.ar</a>></span><br>
<blockquote class="gmail_quote" style="border-left: 1px solid rgb(204, 204, 204); margin: 0pt 0pt 0pt 0.8ex; padding-left: 1ex;">El delirio querulante según:<br>
Tratado de las enfermedades mentales. Por Oswald Bumke.<br>
(director clínica neuropsiquiátrica de Munich, discípulo de Kraepelin).<br>
Traducción de Emilio Mira y López. Prólogo de J. Sanchis-Banús.<br>
Editado por Francisco Seix. Barcelona. ¿1941?<br>
Cortesía del Dr. J. Oncins. Director del Hospital psiquiátrico de Teruel.<br>
Añadido y ampliado por J. L. Día.<br>
<br>
<br>
<br>
<br>
-Limitación del delirio al contexto del agravio inicial, y su extensión<br>
por asociación.<br>
<br>
El delirio queda limitado a este círculo de representaciones.<br>
Todo cuanto de cerca o de lejos, tenga relación con la supuesta injusticia<br>
es incluido en el sistema delirante. El enfermo sólo se preocupa de su<br>
delirio.<br>
Ver ejemplos: si un juez tiene el mismo nombre que un enemigo suyo, éste<br>
también está en contra del enfermo; el presidente de la audiencia ha sido<br>
sustituido porque era la única persona favorable al enfermo; desahuciado<br>
de su casa porque el propietario ha caído en las redes de sus<br>
perseguidores.<br>
Siempre se pueden encontrar los hilos asociativos que conducen de un<br>
elemento a otro, y siempre resulta factible cualquiera de sus ideas<br>
considerada aisladamente.<br>
<br>
<br>
Continuara...<br>
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</blockquote></div><br>