Jaja, que circo.<div>Por favor, explica que tiene de relevante lo de "ex-empleado de Techint". <br><div><br><div class="gmail_quote">2009/5/27 rober <span dir="ltr"><<a href="mailto:rober@qi.fcen.uba.ar">rober@qi.fcen.uba.ar</a>></span><br>
<blockquote class="gmail_quote" style="margin:0 0 0 .8ex;border-left:1px #ccc solid;padding-left:1ex;">Este ex-empleado de Techint llamado Vicentini, que lamentablemente fue<br>
contratado como profesor interino durante un tiempo luego de ser echado de<br>
esa empresa privada, ha vuelto a insultar publicamente, llamando mafiosos<br>
(mediante un panfleto lamentable) a unos 50 docentes e investigadores de la<br>
FCEyN y muchos mas del interior del pais.<br>
<br>
Deberia estar agradecido al Estado, y a la Facultad que le dio de comer<br>
durante algun tiempo, a pesar de sus bajos meritos academicos y/o<br>
profesionales para ocupar el cargo.<br>
<br>
Hoy otra vez insulta desde una cuenta institucional del departamento de<br>
matematicas, depto que en ningun momento desde que comenzaron los insultos<br>
ha condenado sus insultos publicamente ni le ha retirado la cuenta, a pesar<br>
de que el ex-empleado de Techint no tiene vinculo alguno con esta facultad.<br>
<br>
La FCEyN no tiene por que pagarle al ex-empleado de Techint por sus errores<br>
al elegir empleadores inmorales (en caso de que lo hayan echado sin motivo)<br>
ni tampoco por su incapacidad para la matematica aplicada (en caso de que lo<br>
hayan echado con motivo).<br>
<br>
Los docentes de la FCEyN no tenemos por que soportar esto, y mucho menos<br>
enviado desde una cuenta institucional.<br>
<br>
<br>
Roberto Etchenique<br>
<br>
<br>
<a href="mailto:fvicent@dm.uba.ar">fvicent@dm.uba.ar</a> writes:<br>
<br>
><br>
> Ya no tomo mas Coca Cola y la canilla de la cocina no la puedo arreglar y<br>
> ya no puedo comprarme un libro. Todas estas pequeñas calamidades se deben<br>
> al sacrificio que tengo que hacer para estirar hasta fin de mes mi<br>
> miserable haber jubilatorio. Hace 3 años denuncie el fraude al cual habia<br>
> apelado el ex decano Jacovkis para abortar mi contrato y como tal accion<br>
> habia sido secundada por un tal Juan Pablo Paz y como mis reclamos habian<br>
> sido ridiculizados por el mencionado Paz, Marcelo Frías, Hugo Scolnik,<br>
> Willy Duran, Roberto Etchenique,… La manera subita y coordinada como fui<br>
> acribillado me hizo conjeturar la existencia de una mafia. Pero ahora<br>
> quiero excusarme, no hay tal mafia en la FCEN, Uds tenían razón que yo<br>
> estaba paranoico. Leyendo el siguiente artículo me hizo pensar en lo bien<br>
> que me vendría un subsidio para pagarle al plomero.<br>
> ==================================================<br>
><br>
> La Red Mafiosa en la Ciencia y la Universidad Argentina<br>
> por Eduardo R. Saguier<br>
> Investigador Independiente del CONICET<br>
> Email: <a href="mailto:saguiere@ssdnet.com.ar">saguiere@ssdnet.com.ar</a><br>
><br>
> Indice<br>
> I.- Introducción<br>
> II. La Agencia y la complicidad de sus Coordinadores de Área<br>
> III. El Conicet y la complicidad de sus Comisiones Asesoras<br>
> IV. Las Universidades Nacionales y la complicidad de sus Secretarías de<br>
> Ciencia yTécnica<br>
> V. Conclusiones<br>
><br>
> I.- Introducción<br>
><br>
> El origen de la Agencia Nacional para la Promoción Científico-Tecnológica,<br>
> dependiente de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Nación,<br>
> supuestamente obedeció a la necesidad de crear un sistema de<br>
> financiamiento de la ciencia independiente de la institución del<br>
> beneficiado y de paso despojar al CONICET de los fondos con que subsidiaba<br>
> a sus propios Investigadores de Carrera, so pretexto de que no podía ser<br>
> Juez y Parte Intere-sada en la distribución de dichos subsidios.<br>
> Pero con el correr de una sola década, lo que comenzó como un sano<br>
> objetivo de independencia y equilibrio académico terminó paradójicamente<br>
> en las antípodas, pues en los hechos la Agencia, el CONICET, las<br>
> Secretarías de Ciencia y Técnica de las Universidades Nacionales, la<br>
> CONEAU y la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de<br>
> Educación tergiversaron sus principios originarios fusionando íntima e<br>
> ilegal-mente sus mutuos intereses.<br>
> Los Coordinadores de Área de la Agencia, cuya responsabilidad es la de<br>
> asignar los evaluadores de cada proyecto (de identidad confidencial), son<br>
> designados por el Directorio de la Agencia. Estos Coordinadores de Área,<br>
> preceden, acompañan o sobrevienen a los subsidios otorgados a sí mismos,<br>
> lo que configura claramente el ilícito de colusión de intereses.<br>
> Más aún, la Agencia subsidia a ciertos y determinados Investigadores del<br>
> CONICET y en reciprocidad el Directorio del CONICET los designa en sus<br>
> múltiples Comisiones y mediante su propia Junta de Calificaciones los<br>
> asciende en la carrera científica. Este plan tampoco hubiera sido posible<br>
> sin el acompañamiento de nume-rosas autoridades, entre las cuales se<br>
> encuentran todo el staff de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la<br>
> Nación así como todos los funcionarios de las Secretarías de Ciencia y<br>
> Técnica de las diferentes Universidades Nacionales, las cuales han tenido<br>
> mediante las categorizaciones de los denominados Incentivos parte<br>
> intrínse-ca en dicho plan.<br>
> Estas reciprocidades son producto de códigos, privilegios y prerrogativas<br>
> no escritas, mediante las cuales se incluye a los eventuales aliados, se<br>
> utiliza a los auténticamente prestigiosos para infiltrar a los<br>
> inescrupulosos y mediocres, y se excluye con medidas punitivas (rechazo de<br>
> Informes, congelamiento de ascensos, etc.) a los desafectos o a aquellos<br>
> elementos considerados como peligrosos, porque pueden llegar a socabar el<br>
> plan mafioso. Con estos códigos no hay forma de arrepentirse, ni de<br>
> denunciar nunca a sus colegas. La denuncia como la delación equivalen al<br>
> ninguneo y el castigo.<br>
> En un principio, el monto de los subsidios comenzó con cifras de cinco<br>
> dígitos, y más luego alcanzaron los seis dígitos. Por otro lado, en un<br>
> comienzo el número de Áreas temáticas fue razonable pero con el correr del<br>
> tiempo se fueron multiplicando vertiginosamente. La fusión de estos<br>
> organismos de ciencia y técnica y la gestación de numerosos nichos de<br>
> poder académico alcanzó entonces su éxtasis y su fruto ha concluido por<br>
> fragmentar las filas de los científicos e inducir una suerte de paz de los<br>
> sepulcros.<br>
> Debemos señalar que esta investigación pudo ser hecha merced a la<br>
> insistencia en la Lista Electrónica Pol-Cien para que se exhibiera la<br>
> información oculta en el sitio electrónico de la SECyT, que es falto de<br>
> total transparencia y cuyo ocultamiento pareciera ser hecho ex profeso.<br>
> Los cruces entre los diferentes listados fueron hechos a mano, sin<br>
> software alguno y utilizando sólo la memoria humana, por lo que es muy<br>
> probable que se hayan escapado muchas otras correlaciones, especialmente<br>
> la de aquellos que portan apellidos patronímicos (Pérez, Rodríguez,<br>
> González, Fernández, etc.)<br>
><br>
> II.- La Agencia y la complicidad de sus Coordinadores de Área<br>
><br>
> En la Agencia Nacional para la Promoción Científico-Tecnológica,<br>
> dependiente de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Nación (SECYT),<br>
> presidida por el Dr. Lino Barañao, los Coordinadores de Área Jorge Jorrat,<br>
> Marcelo Cabada, Eduardo Arzt, y Jaime Cerda, se habrían adjudicado a sí<br>
> mismos sendos subsidios.<br>
> En efecto, en la Convocatoria-2004, el Coordinador del Área de Ciencias<br>
> Humanas y Sociales Dr. Jorge Jorrat recibió la suma de $209.000; y en la<br>
> Convocatoria-2003, el Coordinador del Área de Ciencias Médicas Dr. Eduardo<br>
> Arzt recibió la suma de $210.000; el Coordinador del Área de Ciencias<br>
> Biológicas Dr. Marcelo Cabada recibió la suma de $210.000, y el<br>
> Coordinador del Área de Tecnología Química Dr. Jaime Cerda también la suma<br>
> de $210.000. Y en la Convocatoria-2002, en una sospechosa operación les<br>
> fue adjudicada igual suma a los que al año siguiente fueron los<br>
> Coordinadores de las Áreas de Tecnología Informática Dr. Marcelo Frías, de<br>
> Tecnología de Alimentos María Cristina Añón, y de Economía y Derecho Dr.<br>
> Luis Beccaria.<br>
> Asimismo, a los miembros del Directorio del CONICET Faustino Siñeriz,<br>
> Carlos Rapela y Dra. Noemí Girbal de Blacha les fue asignada a cada uno en<br>
> la Convocatoria-2002 la suma de $210.000; y a la Dra. Girbal en la<br>
> Convocatoria-2005 una suma indeterminada bajo el Código 32.396. Y al<br>
> Asesor de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Nación y Director del<br>
> Observatorio Científico-Tecnológico Dr. Mario Albornoz le fue adjudicada<br>
> en la Convocatoria-2003 la suma de $128.000, y en la Convocatoria-2005 una<br>
> suma indeterminada bajo el Código 33.851.<br>
> A los Coordinadores de Área, que han sido denunciados al comienzo de este<br>
> escrito, debemos agregar los Coordinadores siguientes:<br>
> 1. En la Convocatoria-2005 les fue adjudicado subsidios por diferentes<br>
> montos a los Coordinado-res de Área Marcelo Cabada, Juan José Cazzulo,<br>
> Eduardo Arzt, Alcira Batlle, Juan José Podero-so, Horacio Corti, Alberto<br>
> Vargas, Luis Gugliotta, y Ana María Antón.<br>
> 2. En la Convocatoria-2004 les fue adjudicado subsidios por diferentes<br>
> montos a los Coordinado-res de Área Eduardo Cánepa, Mirta Quattrochio,<br>
> Juan Pablo Paz, Rodolfo Sánchez, Damián Zanetti, Juan Jose Poderoso,<br>
> Amelia Rubiolo y Verónica Bucala.<br>
> 3. En la Convocatoria-2003 les fue adjudicado subsidios por diferentes<br>
> montos a los Coordinado-res de Área Carlos A. Balseiro, Juan José Cazzulo,<br>
> Horacio Corti, Roberto Rossi, Carlos Lanusse, Isidoro Schalamuk, y Ricardo<br>
> Carelli<br>
> 4. En la Convocatoria-2002 les fue adjudicado subsidios por diferentes<br>
> montos a los Coordinado-res de Área Gustavo Politis, Luis Alberto Beaugé,<br>
> Roberto Salvarezza, Ricardo Astini, Beatriz Coira, Hermenegildo Ceccatto,<br>
> Carlos Gigolo, Luis Mroginski, Maria Cristina Anón, Luis Beccaria y<br>
> Marcelo Frías.<br>
> 5. En la Convocatoria-2000/2001 les fue adjudicado diferentes subsidios<br>
> por diferentes montos a los Coordinado-res de Área Eduardo Cánepa, Juan<br>
> José Cazzulo, Marcelo Cabada, Rodolfo Sán-chez, Damián Ravetta, Gustavo<br>
> Corach, Juan Pablo Paz, Juan José Poderoso, Alcira Batlle, Bea-triz Coira,<br>
> Walter Helbling, Ana María Parma, Alberto Escande, Amelia Rubiolo, Alberto<br>
> Vargas, Francisco Felipe Garcés, y el actual Presidente de la Agencia Lino<br>
> Barañao.<br>
> En efecto, en la Convocatoria-2005, les fue adjudicado a los Coordinadores<br>
> del Área de Ciencias Biológicas Marcelo Cabada y Juan José Cazzulo montos<br>
> indeterminados bajo los códigos 31.660 y 38211; a los de Cien-cias Médicas<br>
> Eduardo Arzt, Alcira Batlle, Juan José Poderoso cifras indeterminadas bajo<br>
> los códigos 31.541, 32642, y 34.785; al de Ciencias Químicas Horacio Corti<br>
> una cifra indeterminada bajo el código 32.916; al de Tecnología Energética<br>
> Alberto Vargas una cifra indeterminada bajo el código 32.438; al de<br>
> Tecnología Química Luis Gugliotta una cifra indeterminada bajo el código<br>
> 38.158; y al de Ciencias Biológicas de Organismos Ana María Antón un monto<br>
> indefinido bajo el código 34.901.<br>
> En la Convocatoria-2004, le fue adjudicado al Coordinador del Área de<br>
> Ciencias Biológicas Dr. Eduardo Cánepa un subsidio por $280.000; al de<br>
> Ciencia de la Tierra Mirta Quattrochio $223.000; a los de Ciencias<br>
> Fisico-Matemáticas Juan Pablo Paz $271.000, Rodolfo Sánchez $200.000; y<br>
> Damián Zanetti $202.000; al de Ciencias Médicas Juan José Poderoso<br>
> $279.000; al de Ciencia de la Tierra Rodolfo Sánchez $78.802; al de<br>
> Tecnología de Alimentos Amelia Rubiolo $280.000; y al de Tecnología<br>
> Química Verónica Bucala $248.000.<br>
> En la Convocatoria-2003, le fue adjudicado al Coordinador del Área de<br>
> Ciencias Matemáticas Carlos A. Balseiro $210.000; al de Ciencias<br>
> Biológicas Juan José Cazzulo $210.000; a los de Ciencias Químicas Horacio<br>
> Corti $209.000 y Roberto Rossi $210.000; al de Tecnología Pecuaria Carlos<br>
> Lanusse $210.000; al de Tecnología Energética Isidoro Schalamuk $206.000;<br>
> y al de Tecnología Informática Ricardo Carelli $256.000. A propósito, el<br>
> Coordinador Roberto Rossi, aquí mencionado, sería el mismo que figura en<br>
> La Nación del viernes 1º de diciembre como habiendo recibido el Premio<br>
> Sadoski-Bernardo Houssay.<br>
> En la Convocatoria-2002, le fue adjudicada al Coordinador de Ciencias<br>
> Humanas Gustavo Politis $200.000; al de Ciencias Médicas Luis Alberto<br>
> Beaugé $210.000; al de Ciencias Químicas Roberto Salvarezza $193.000; a<br>
> los de Ciencias de la Tierra Ricardo Astini $210.000 y Beatriz Coira<br>
> 204.000; al de Ciencias Físico-Matemáticas Hermenegildo Ceccatto $200.000;<br>
> al de Tecnología Química Carlos Gigoló $85.000; al de Tecnología Agraria<br>
> Luis Mroginski $163.000; a la de Tecnología de Alimentos María Cristina<br>
> Anon $209.000; al de Economía y Derecho Luis Beccaria $121.000; y al de<br>
> Tecnología Informática Marcelo Frías $206.000.<br>
> En la Convocatoria-2000/2001, le fue adjudicada a los Coordinadores del<br>
> Área de Ciencias Biológicas Eduardo Cánepa $130.000; Juan José Cazzulo<br>
> $140.000; y Marcelo Cabada $90.000; a los de Tecnología Agraria Ro-dolfo<br>
> Sánchez $84.000 y Damián Ravetta $140.000 (este último colaborador del<br>
> Ing. Víctor Kopp, Director del Área Técnica de Gestión de Subsidios); a<br>
> los de Ciencias Físico-Matemáticas Gustavo Corach $105.000 y Juan Pablo<br>
> Paz $90.000; al de Ciencias Médicas Juan José Poderoso $105.000; a la de<br>
> Ciencias Químicas Alcira Batlle $150.000; al de Ciencias de la Tierra<br>
> Beatriz Coira $120.000; al de Ciencias Biológicas de Organismos Walter<br>
> Helbling $130.000; al de Tecnología Pecuaria Ana María Parma $100.000; al<br>
> de Tecnología Agraria Alberto Escande $105.000; al de Tecnología de<br>
> Alimentos Amelia Rubiolo $150.000; y a los de Tecnología Energética<br>
> Alberto Vargas $84.000 y Francisco Felipe Garcés $72.000. En esta última<br>
> Convocatoria 2000/2001 le fue adjudicada al Prof. Lino Barañao la suma de<br>
> $140.000; al ex Presidente del CONICET y actual Director General del<br>
> FONCYT Armando Bertranou $75.000; y a los Decanos Alberto Boveris y Héctor<br>
> Trinchero $170.000 a cada uno. En la Convocatoria-2005 registra su<br>
> aparición el ex Secretario de Ciencia y Técnica del Menemismo Juan Carlos<br>
> del Bello bajo el código 35.196, y la Secretaria de Educación de la<br>
> Provincia de Buenos Aires Adriana Puiggrós con un monto indefinido bajo el<br>
> código 38.346. También registra un subsidio el reciente-mente ascendido a<br>
> la máxima categoría de Investigador Superior del CONICET Martín Isturiz<br>
> con una suma indefinida bajo el código 38.197<br>
><br>
> III.- El Conicet y la complicidad de sus Comisiones Asesoras<br>
><br>
> La presencia de los miembros del Directorio del CONICET Faustino Siñeriz,<br>
> Carlos Rapela y Noemí Girbal de Blacha entre los integrantes de la Cadena<br>
> de la Felicidad de la Ciencia Argentina ha confirmado la sospecha de la<br>
> existencia de una íntima reciprocidad entre la Agencia y el CONICET.<br>
> Cruzando la actual lista de integrantes de las Comisiones Asesoras del<br>
> CONICET, correspondiente al año 2006, con las Listas de los beneficiados<br>
> por la Agencia-SEPCyT durante el último quinquenio ha dado como resultado<br>
> casi un centenar de correlaciones, las que eventualmente revelarían la<br>
> identidad de los integrantes de ese falso Parnaso en que se ha convertido<br>
> la Cadena de la Felicidad aquí denunciada.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión Asesora de Ciencias Médicas, los que<br>
> recibieron subsidios en el año 2000/ 2001 fueron Aldo Mottino con la suma<br>
> de $105.000; Carlos José Pirola con la suma de $120.000; Oscar Botta-sso<br>
> con un total de $92.000; y Héctor Targovink con el monto de $105.000; en<br>
> el año 2002 fueron Patricia Elizalde con la suma de $210.000; Ana María<br>
> Franchi con la suma de $210.000, y la Alicia Belgorosky con la suma de<br>
> $210.000; en el año 2003, Hugo Daniel Luján recibió la suma de $210.000, y<br>
> Osvaldo Uchitel la suma de $200.000; en el año 2004 los que recibieron<br>
> fueron Rodolfo Campos la suma de $279.000; Jorge Geffner la suma de<br>
> $174.000; María Ángela Lazzari la suma de $280.000; Alicia Mattiazzi la<br>
> suma de $251.000; Héctor Targovnik volvió a recibir otro monto de<br>
> $252.000; y Mario G. Murer la suma de $195.000. En este último caso,<br>
> habría que aclarar que el Dr. Murer había ya recibido en el año 2002 la<br>
> suma de $110.334. Y en el año 2005, los que recibieron fueron Claudia<br>
> Capurro una suma bajo el código 32.130; Osvaldo Podhajcer un monto bajo el<br>
> código 38.011; y otra vez Osvaldo Uchitel una suma desconocida.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión de Biología Alfredo Juan Castro<br>
> Vázquez recibió en 2002 la suma de $147.000; y en el año 2005 Miguel Angel<br>
> Sosa Escudero recibió una suma indefinida bajo el código 33.383; y Marta<br>
> Dolores Mudry un monto bajo el código 38.001.<br>
> Entre los miembros de la Comisión de Química, en el año 2000/2001 María<br>
> Rita Micaela Hoyos de Rossi recibió un total de $140.000; Manuel López<br>
> Teijelo la suma de $94.000; y Carlos Previtali un total de $105.000; en el<br>
> año 2002 el Coordinador Gerardo Burton recibió la suma de $202.000; en el<br>
> año 2004 los que recibieron fueron Edgardo Durantini la suma de $203.000;<br>
> Luis Dante Martínez el monto de $160.000; y José Carmelo Pedregosa la suma<br>
> de $267.000. Y en el año 2005, Carlos M. Previtali volvió a recibir un<br>
> monto indeterminado bajo el có-digo 32.351. Entre los integrantes de la<br>
> Comisión de Bioquímica, en el año 2004, la Coordinadora Beatriz Capu-tto<br>
> recibió la suma de $280.000; José Luis Bocco recibió $279.000; Horacio<br>
> Garda recibió $270.000; Fernando Goldbaum el monto de $280.000; y María<br>
> Isabel Colombo recibió la suma de $276.000. En este último caso, habría<br>
> que aclarar que la Dra. Colombo había ya recibido en el año 2002 un monto<br>
> de $196.771.<br>
> Entre los miembros de la Comisión de Matemáticas y Computación Juan Santos<br>
> recibió en 2002 la suma de $205.000; y Graciela Boente Boente recibió en<br>
> 2004 la suma de $177.000. Entre los miembros de la Comisión de Física,<br>
> Ricardo Piegaia recibió en 2002 la suma de $171.249; y en el 2005<br>
> recibieron Jorge Fernández Niello una suma indefinida bajo el código<br>
> 32.757; y Patricia Levstein otro monto desconocido bajo el código 33.623.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión de Astronomía, su Coordinador Pablo<br>
> J. Mauas recibió en 2005 una suma indeterminada bajo el código 32.408.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión de Ciencias Exactas y Naturales<br>
> Gerardo Perillo quien desempeña a su vez el cargo de Coordinador de la<br>
> Comisión de Ciencias de la Tierra, recibió en 2004 la suma de $272.000.<br>
> Entre los miembros de la Comisión de Ciencias Agrarias, en el año 2002<br>
> Roberto Lecuona recibió la suma de $175.000; y en el año 2003 Sofía Chulze<br>
> recibió un total de $210.000. Entre los integrantes de la Comisión de<br>
> Veterinaria, en 2000/2001 Osvaldo Rossetti recibió la suma de $75.000; y<br>
> en 2002 Enrique Portianski recibió un total de $197.000. Entre los<br>
> miembros de la Comisión de Ciencias de la Tierra, el Agua y la Atmósfera,<br>
> en 2000/2001 Analía Artabe recibió $75.000; Sergio Matheos la suma de<br>
> $85.000; y Alejandro Tosselli la suma de $150.000; en 2002 Carlos<br>
> Cingolani recibió la suma de $188.167; en 2004 Susana Bischoff recibió un<br>
> total de $220.000; y en el 2005 los que recibieron fueron nuevamente<br>
> Analía Artabe una suma bajo el código 32.323; y Alicia Ronco un monto bajo<br>
> el código 38.350.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión Asesora de Ingeniería Civil, Mecánica<br>
> y Eléctrica, el Ing. Guillermo Kauf-man recibió en 2005 una suma bajo el<br>
> código 38.168. Entre los miembros de la Comisión Asesora de Ingeniería y<br>
> Procesos Industriales y Biotecnológicos en 2000/2001 José Bandoni recibió<br>
> la suma de $120.000.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión de Ciencias Humanas, María Isabel<br>
> Santa Cruz recibió en 2005 una suma bajo el código 38.227. Entre los<br>
> miembros de la Comisión de Arquitectura en 2000/2001 Beatriz Cuenya<br>
> recibió la suma de $60.000. Entre los integrantes de la Comisión de<br>
> Historia y Antropología en 2000/2001 Cristina Bellelli recibió la suma de<br>
> $92.000.<br>
> También han sido beneficiados con subsidios los integrantes de las<br>
> Comisiones Asesoras Pablo Penchaszadeh, Alfredo Bolsi y Guillermo Mengoni<br>
> Goñalons. También se registra este fenómeno: en la Universidad de Córdoba<br>
> con los Investigadores Dora Celton y César Tcach; en la Universidad de<br>
> Cuyo con el biólogo Alfredo Castro Vázquez; y en la Universidad Nacional<br>
> del Sur con el tecnólogo químico José Alberto Bandoni, quien integra la<br>
> Comisión Asesora de Ingeniería de Procesos Industriales y Biotecnología.<br>
> Entre los miembros de la Comisión Asesora Interdisciplinaria Especial<br>
> Ad-Hoc de la Gran Área de Ciencias Agrarias, Noemí Walsoe de Reca recibió<br>
> en el año 2003 una indefinida suma de dinero; y en la de Ciencias<br>
> Biológicas Stella González Cappa recibió un monto indeterminado, Ricardo<br>
> Farías $210.000 en 2003, y Rodolfo Ugalde que a su vez desempeña el cargo<br>
> de Coordinador de la Comisión de Veterinaria y fue Director del Consejo de<br>
> Investigaciones Científicas (CIC) de la Provincia de Buenos Aires recibió<br>
> $210.000 en 2003 y $275.000 en 2004.<br>
> Entre los integrantes del Comité Asesor del Núcleo Básico de Revistas<br>
> Científicas les fue adjudicado a Alfredo Bolsi $30.000 en 2000/01, a Dora<br>
> Barrancos $208.000 en 2004, a Alejandro Rofman $135.000 en 2004, a Marcelo<br>
> Cavarozzi $204.000 en 2004 y una cifra indeterminada a Stella González<br>
> Cappa.<br>
> Entre los integrantes de la Comisión Ad-Hoc-Recursos correspondiente a las<br>
> Ciencias Sociales le fue adjudica-da a Ana María Lorandi en 2003 la suma<br>
> de $72.969 y a Víctor Tau Anzoátegui $50.000 en 2000/2001 y un total de<br>
> $95.000 en 2003. Entre los integrantes de la Comisión Ad-Hoc de<br>
> Materiales, Roberto Salvarezza recibió en 2002 la suma de $193.000.<br>
> Y finalmente, entre los miembros del Comité Nacional de Ética en Ciencia y<br>
> Tecnología de la SECYT Stella M. González Cappa, Alberto R. Kornblihtt,<br>
> Armando Parodi y Otilia Vainstok recibieron jugosos subsidios. La Dra.<br>
> González Cappa lleva acumulados desde 1998 tres diferentes subsidios de<br>
> tres dígitos cada uno. ¿Sus otros miembros Roberto Fernánez Prini, Samuel<br>
> Finkielman, Noé Jitrik, Ernesto E. Maqueda, Fernando O. Ulloa y Aída<br>
> Kemelmajer de Carlucci tendrán algo para opinar respecto a la Cadena de la<br>
> Felicidad recientemente descu-bierta bajo sus narices? ¿Ninguno de estos<br>
> científicos expertos en temas de ética sospechó ninguna anorma-lidad?<br>
><br>
> IV.- Las Universidades Nacionales y la complicidad de sus Secretarías de<br>
> Ciencia y Técnica<br>
><br>
> Habíamos descubierto que los Coordinadores de la Agencia -elegidos por el<br>
> Directorio para seleccionar los evaluadores de cada Proyecto-- también<br>
> fueron simultánea o en forma diferida beneficiarios de subsidios. Más<br>
> luego hallamos que la Agencia subsidia a ciertos y determinados<br>
> Investigadores del CONICET y en reciprocidad el Directorio del CONICET los<br>
> designa en sus múltiples Comisiones y mediante su propia Junta de<br>
> Calificaciones los asciende en la carrera científica. Y hoy venimos a<br>
> descubrir que esta suerte de asociación ilícita no habría sido tampoco<br>
> posible sin la sociedad de las Secretarías de Ciencia y Técnica de las<br>
> diferentes Facultades y/o Universidades Nacionales, las cuales han tenido<br>
> merced a los Bancos de Evaluadores de la Secretaría de Polí-ticas<br>
> Universitarias y de la CONEAU -que establecen cual si fueran juntas de<br>
> calificación categorizaciones y puntajes a nivel individual e<br>
> institucional-- parte intrínseca en la eventual asociación ilícita y en<br>
> sus derivacio-nes penales, en cuanto a apoderamiento fraudulento,<br>
> usufructo patrimonial del cargo y enriquecimiento ilícito.<br>
> Entre las funciones y responsabilidades de los Secretarios de Ciencia y<br>
> Técnica de las Facultades y/o Univer-sidades Nacionales, la tercera pata<br>
> del trípode burocrático sobre el cual estaría montada la red que domina la<br>
> producción del conocimiento científico en Argentina, está la de hacer el<br>
> seguimiento de los Proyectos de In-vestigación financiados por organismos<br>
> nacionales, provinciales y/o universitarios, así como la de administrar<br>
> las Rendiciones de Cuentas de los gastos practicados por los Responsables<br>
> de los Proyectos financiados.<br>
> Los funcionarios que deben otorgar subsidios a otros y que por el<br>
> contrario se lo otorgan a sí mismos o a terceros que son afines por<br>
> amistad o parentesco habrían incurrido en varios delitos: en primer lugar<br>
> en nego-ciaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública; en<br>
> segundo lugar en la construcción de una red ilegal de apoderamiento<br>
> fraudulento de las estructuras de decisión de las universidades<br>
> (Rectorados, Decana-tos y Secretarías de Investigación), y de las<br>
> instituciones de dominación académica (CIN, CONEAU, CONICET, ANPCYT),<br>
> estas últimas alimentadas con los Bancos de Evaluadores provistos por<br>
> aquellas; en tercer lugar se habrían convertido en partícipes de una<br>
> asociación ilícita agravada en razón del cargo detentado; en cuarto lugar<br>
> habrían incurrido en lo que se conoce como usufructo patrimonial del<br>
> cargo; y en última instancia en enriquecimiento ilícito.<br>
> Estas conductas alcanzan a los mismos socios del silencio, que son los que<br>
> medran compartiendo subsidios y proyectos (conductas tipificadas en los<br>
> artículos 248, 256, 260, 261 y 210 del Código Penal), por cuanto la<br>
> obligación del funcionario académico es otorgar subsidios a los que lo<br>
> peticionan y no incurrir en incompatibili-dades manifiestas otorgándoselo<br>
> a sí mismo o a sus socios o amigos. Por cierto, para que la indagación de<br>
> la existencia de una asociación ilícita fuera más plenamente acreditada se<br>
> debería requerir la información relativa a los parentescos carnales y<br>
> políticos, que como cualquier fiscal federal conoce son en el interior del<br>
> país -por razones demográficas-una realidad más intensa y palpable que en<br>
> la capital de la república.<br>
> En cuanto al contralor de la gestión administrativa, tenemos que las<br>
> Universidades Nacionales practican dis-tintos criterios para ejecutar la<br>
> función de auditoria, con muy diversos grados de rigor y transparencia,<br>
> pues que se sepa no han descubierto hasta hoy ningún caso de apoderamiento<br>
> fraudulento y/o enriquecimiento ilícito. Algunas Universidades han<br>
> unificado esta responsabilidad en una Secretaría u organismo centralizado<br>
> y otras lo han diversificado en tantas Secretarías como Facultades existen<br>
> en sus organigramas. Para el caso, tenemos que la Universidad Nacional de<br>
> Tucumán tiene desde hace un tiempo al frente de su Secretaría de Ciencia y<br>
> Técnica al historiador Daniel Campi, el mismo a quien la Agencia financió<br>
> en el 2002 con un subsidio de $135.938.<br>
> En la Universidad Nacional de Córdoba, figura a la cabeza de la Secretaría<br>
> de Ciencia y Técnica el químico Héctor Rubinstein, el mismo que fue<br>
> financiado en el período anterior de 2005 con un subsidio cuyo monto aún<br>
> sigue indeterminado. En la Universidad Nacional de Rosario, el Secretario<br>
> de Ciencia y Técnica de la Facultad de Ciencias Exactas Roberto Aquilano<br>
> se benefició en 2005 con un subsidio de monto indeterminado. En la misma<br>
> universidad, el Secretario de Ciencia y Técnica de la Facultad de Medicina<br>
> Oscar Bottasso se benefició en 2004 con un subsidio de $213.125. En la<br>
> Universidad Nacional de Córdoba, el Decano de Ciencias Químicas Gerardo<br>
> Fidelio recibió en el 2001 la suma de $134.000. Y en la Universidad<br>
> Nacional del Litoral, la Vice-Deca-na de la Facultad de Farmacia Yolanda<br>
> Bolzón de Lombardo se benefició en 2005 con otro subsidio de suma<br>
> indefinida.<br>
> En la provincia de Buenos Aires, los actos cuestionados tampoco<br>
> escasearon. En la Universidad Nacional del Sur, el actual Secretario de<br>
> Ciencia y Técnica Osvaldo Agamennoni recibió en 2003 la suma de $147.727.<br>
> En la Universidad Nacional de Mar del Plata, el Decano de Ciencias Exactas<br>
> Gustavo Daleo y la Secretaria de Investigaciones Virginia Manzini<br>
> recibieron en 2005 sendas sumas de monto indeterminado. En la Universidad<br>
> Nacional de San Martín, el Director de la Escuela de Política Marcelo<br>
> Cavarozzi se benefició en 2004 con un subsidio de $204.529; y el<br>
> Secretario de Investigación Diego Hurtado de Mendoza fue financiado en<br>
> 2004 con un subsidio de $71.279. Y en la Universidad Nacional de Quilmes<br>
> tenemos el caso de un Consejero Departa-mental el biólogo Pablo<br>
> Ghiringhelli, quien obtuvo en el 2005 un subsidio de la Agencia por un<br>
> monto indefinido de pesos; y el de un biólogo Mario R. Ermácora, que fue<br>
> subsidiado reiteradamente en dos períodos consecu-tivos, el del 2004 y el<br>
> del 2005.<br>
> En el caso de la UBA, tenemos que algunos de los integrantes de la media<br>
> docena de Comisiones Técnicas Asesoras (CTA) --que tienen como función<br>
> prestar asesoramiento en las tareas de evaluación de las distintas<br>
> actividades de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UBA-- serían<br>
> también hipotéticamente parte necesaria de la red denunciada. Entre los<br>
> beneficiarios de los subsidios por cifras aún no divulgadas, repartidos<br>
> por la Agencia en el 2005, se encuentran los siguientes Investigadores: el<br>
> miembro de la CTA No.1, de las Ciencias de la Salud Humana Rodolfo<br>
> Rothlin; el integrante de la CTA No.3 de Ingeniería, Ciencias Ambientales<br>
> y Habitat Juan Manuel Borthagaray (quien a su vez suma otro subsidio del<br>
> 2002 de $210.000); los miembros de la CTA No.4, de Ciencias Básicas y<br>
> Biológicas Alicia Godeas (PICT-2003 de $208.980) y Juan Pablo Rossi (quien<br>
> a su vez suma otro subsidio del 2002 de $206.250); los miembros de la CTA<br>
> No.5, de Ingeniería, Ciencias del Am-biente y Habitat Guillermo Artana y<br>
> Jorge Alberto Sarquis; y los integrantes de la CTA No.6 de Ciencias<br>
> Agro-pecuarias y Salud Animal: Ana Pilosof, Jorge Casal, Alejandro<br>
> Mentaberry, Angel Chiesa (suma otro subsidio del 2002 de $203.708) y<br>
> Alicia Fernández Cirelli, ex Presidenta de UBACYT durante el Menemismo.<br>
> Por último, fal-taría contrastar las listas de beneficiarios de subsidios<br>
> con los anteriores integrantes de estas mismas Comi-siones Técnicas<br>
> Asesoras, que por cierto no están exhibidos en la web, seguramente dados<br>
> de baja para no dejar rastros de sus reiterados ilícitos.<br>
> En cuanto a las Secretarías de Ciencia y Técnica de cada Facultad de la<br>
> UBA, tenemos que en la Facultad de Odontología, el Secretario de Ciencia y<br>
> Técnica Enri Santiago Borda -integrante del CTA No.1-- ganó en el 2005<br>
> otro PICT de monto desconocido. En la de Farmacia y Bioquímica el<br>
> Secretario de CyT Daniel Turyn ganó en 2004 un subsidio por $212.925. Y en<br>
> la de Medicina, en la actual Comisión de Investigación de dicha Facul-tad<br>
> el Dr. Daniel Sordelli ganó en el 2002 un subsidio por $210.000. Asimismo,<br>
> en la UBA hemos encontrado entre los beneficiados por la Agencia al Decano<br>
> de Filosofía y Letras Héctor Trinchero con $170.000, al Deca-no de<br>
> Farmacia Alberto Boveris con $140.000, a la Vice-Decana de Farmacia<br>
> Graciela Ferraro con una suma indeterminada, al Vice-Decano de Medicina<br>
> Ricardo Gelpi con un subsidio en 2002 de $161.812; y a un ex Decano de<br>
> Sociales Fortunato Mallimacci con $362.186 en 2004. Entre el staff de la<br>
> Secretaría de Ciencia y Técnica de la Nación nos tropezamos con el nunca<br>
> tan bien recordado Hugo Levato, el mismo que aseguraba durante el Proceso<br>
> y desde USA lo bien exonerados que estaban los Investigadores que más<br>
> luego "desapare-cieron". En efecto, en el 2004 Hugo Levato levantó en la<br>
> Agencia un subsidio por la suma de $231.422. Y en el caso de la CONEAU,<br>
> dos miembros de su Directorio, el sociólogo y ex funcionario de la<br>
> Universidad Nacional de Quilmes Ernesto Villanueva, y el sociólogo Carlos<br>
> Pedro Krotsch recibieron de la Agencia respectivamente en 2002 y 2005 la<br>
> suma de $155.354 y de un monto desconocido.<br>
> También contamos con los extraños casos de aquellos Investigadores que<br>
> aparecen financiados de manera duplicada, es decir con subsidios otorgados<br>
> a la misma persona y/o su homónima, en dos proyectos corres-pondientes a<br>
> unidades académicas distintas. Este ha sido el caso en la Universidad<br>
> Nacional del Centro del Investigador Alberto Parma, quien aparece con un<br>
> subsidio otorgado en el 2005 en el Área de las Ciencias Médicas, y otro<br>
> tanto en el mismo período en el Área de la Tecnología Pecuaria. El del<br>
> Investigador Jorge Calvo, de la Universidad La Patagonia, y<br>
> simultáneamente miembro de la Junta de Calificaciones del CONICET, quien<br>
> aparece subsidiado en el mismo período del 2005 en dos Proyectos<br>
> distintos, uno en el Área de las Ciencias de la Tierra y el otro en el<br>
> Área de las Ciencias Biológicas de Organismos. Y el del Investigador<br>
> Emilio Malchiodi de la UBA, quien figura subsidiado en el Área de las<br>
> Ciencias Biológicas y también en el Área de las Ciencias Médicas.<br>
> Para el caso de la Universidad Nacional de Rosario contamos con el muy<br>
> particular ejemplo de un matrimonio cuyos integrantes tuvieron ambos la<br>
> felicidad de que la ANPCYT les financiara sendos proyectos, tanto el del<br>
> marido, el biólogo Ricardo Duffard, en el 2005; como el de su esposa la<br>
> tecnóloga del medio ambiente Ana María Evangelista de Duffard, con un<br>
> monto de $258.333 devengado en el 2004, que sumados ambos dan en la unidad<br>
> familiar más de medio millón de pesos en un par de años.<br>
> Por último, la cuarta pata de la mesa sobre la cual está mal servida la<br>
> ciencia argentina sería la Secretaría de Políticas Universitarias y la<br>
> CONEAU, ambas dependientes del Ministerio de Educación de la Nación,<br>
> institucio-nes destinadas a categorizar a los denominados docentes<br>
> investigadores y a los programas de las institucio-nes de docencia<br>
> superior. Ambas instituciones se han prestado hasta el presente, a través<br>
> de las supuestas categorizaciones y puntajes, a toda suerte de<br>
> manipulaciones y conspiraciones, de la cual están privilegiada-mente<br>
> exentos quienes son docentes de universidades o investigadores<br>
> correspondientes al ámbito privado. Es decir, los miembros de<br>
> instituciones o universidades privadas están excepcionalmente dispensados<br>
> de tener que pasar por las horcas caudinas y kafkianas de una inmensa<br>
> burocracia estatal.<br>
><br>
> V.- Conclusiones<br>
><br>
> Para completar esta investigación faltaría conseguir la Lista de Subsidios<br>
> del corriente año 2006 y cruzar la Lista de Subsidios de la Agencia con<br>
> las Listas de las Comisiones Asesoras del CONICET correspondientes a los<br>
> años 2000/2001, 2002, 2003 y 2004, y así poder comprender el cuadro de<br>
> gerenciamiento de la red denuncia-da. Asimismo, quedaría por cruzar esta<br>
> información con las Listas de Ascensos practicados por la Junta de<br>
> Calificaciones del CONICET, y con las Listas de los categorizados para los<br>
> Incentivos producidas por las dife-rentes Universidades Nacionales. Cabe<br>
> agregar que la metodología es la misma que se inauguró en los Premios<br>
> Bernardo Houssay, que se repartieron en 1987, y que se denunciaron en su<br>
> oportunidad con nombres y ape-llidos, y donde uno de sus organizadores<br>
> integra la actual Junta de Calificaciones del CONICET.<br>
> En todos estos Listados llaman la atención más de una docena de<br>
> repeticiones, como ser las de Eduardo Cánepa, Rodolfo Sánchez, Juan José<br>
> Poderoso, Héctor Targovnik, Mario G. Murer, Osvaldo Uchitel, Mario<br>
> Albornoz, Víctor Tau Anzoátegui, Carlos M. Previtali, Analía Artabe, María<br>
> Isabel Colombo, Beatriz Coira y Amelia Rubiolo, quienes aparecen como<br>
> beneficiarios en repetidas Convocatorias. El de Poderoso parece ser el más<br>
> llamativo pues también registra un tercer subsidio en el 2005.<br>
> Las preguntas que caben formularse son de orden jurídico y moral: ¿los<br>
> actos académicos administrados por estos Coordinadores cuentan con validez<br>
> moral y legal? ¿Estamos o no frente a un caso criminal, y en tal<br>
> eventualidad corresponde o no efectuar una denuncia judicial? ¿De tratarse<br>
> de un delito los actos de los imputados deberían ser reconsiderados y en<br>
> ese caso deberían o no restituir los dineros recibidos? ¿Qué pasa con los<br>
> numerosos proyectos que fueron rechazados y cuyos evaluadores fueron<br>
> designados por los Coordi-nadores aquí denunciados? y ¿Que responsabilidad<br>
> les cabría en este entuerto a los Presidentes del ANPCYT y del CONICET<br>
> Lino Barañao y Eduardo Charreau y a sus directos superiores Tulio Del Bono<br>
> y Daniel Filmus?.<br>
> Toda esta investigación lleva al viejo enigma socrático sobre si es acaso<br>
> posible democratizar una mafia, que impida los abusos de poder y las<br>
> repeticiones dolosas de las prebendas racionadas, o por el contrario ello<br>
> es una tarea imposible. Por lo pronto, se debería considerar las ventajas<br>
> y menores riesgos de error de premiar obras consumadas sobre la de<br>
> subsidiar obras proyectadas cuyos eventuales beneficiados deben ser<br>
> previa-mente categorizados por una burocracia estatal contaminada.<br>
> Finalmente, debemos concluir que la lucha contra la corrupción en el campo<br>
> de la ciencia sólo puede tener éxito desde la instancia política, y que<br>
> ninguna esperanza puede cifrarse en la judicialización de la misma. Es<br>
> entonces la política la que --en el marco de los derechos y garantías<br>
> democráticos- debe producir el sanea-miento moral y el cambio estructural.<br>
><br>
> Fuente Documental<br>
> Convocatoria-2000-2004<br>
> <a href="http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/foncyt_convocatorias_anteriores_pict.php" target="_blank">http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/foncyt_convocatorias_anteriores_pict.php</a><br>
> Convocatoria-2005<br>
> <a href="http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/TIPO_A_Y_B.pdf" target="_blank">http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/TIPO_A_Y_B.pdf</a><br>
> Proyectos No Admitidos en 2004<br>
> <a href="http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/pict2004_no_admis.pdf" target="_blank">http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/pict2004_no_admis.pdf</a><br>
> Proyectos No Admitidos en<br>
> 2003<a href="http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/pict2003_no_admis.pdf" target="_blank">http://www.agencia.gov.ar/convocatorias/documentosconvocatorias/pict2003_no_admis.pdf</a><br>
> _______________________________________________<br>
> Todos mailing list<br>
> <a href="mailto:Todos@df.uba.ar">Todos@df.uba.ar</a><br>
> <a href="http://www.df.uba.ar/mailman/listinfo/todos" target="_blank">http://www.df.uba.ar/mailman/listinfo/todos</a><br>
<br>
<br>
<br>
Roberto Etchenique<br>
Profesor Titular DP<br>
DQIAyQF - FCEN - UBA<br>
_______________________________________________<br>
Alumnos mailing list<br>
<a href="mailto:Alumnos@dc.uba.ar">Alumnos@dc.uba.ar</a><br>
<a href="https://listas.dc.uba.ar/cgi-bin/mailman/listinfo/alumnos" target="_blank">https://listas.dc.uba.ar/cgi-bin/mailman/listinfo/alumnos</a><br>
</blockquote></div><br></div></div>