La izquierda servil y util a la derecha sigue su tradición.<br><br>En un momento donde hay un proyecto de país que intenta redistribuir la riqueza, <br>que logro sacar de quicio a la derecha recalcitrante de este pais, <br>
que hace rato estaba dormida porque se hacia el proyecto que esta derecha quería, <br>¿que hace la izquierda idiota?<br><br> Lo de siempre: se opone sistemáticamente, sin señalar dónde está el verdadero enemigo: en los que quieren un país donde el lomo cueste 80 pesos el kilo. <br>
<br>Krisis, si.. <br>Krisis de Krecimiento. <br><br>Saludos<br>Luciano<br><br><br><br><br><div class="gmail_quote">2009/3/25 conCienciaCrítica Graduados/Docentes/Becarios <span dir="ltr"><<a href="mailto:concienciacritica@de.fcen.uba.ar">concienciacritica@de.fcen.uba.ar</a>></span><br>
<blockquote class="gmail_quote" style="border-left: 1px solid rgb(204, 204, 204); margin: 0pt 0pt 0pt 0.8ex; padding-left: 1ex;"><br>
CRISIS SE ESCRIBE CON K<br>
que los platos rotos los paguen los verdaderos responsables y no el<br>
conjunto del pueblo<br>
<br>
El (des)acople argentino<br>
<br>
El año 2009 comenzó con una de las crisis económicas más fuertes que haya<br>
atravesado el mundo. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner primero<br>
intentó mostrar que la Argentina estaba "desacoplada" de la crisis<br>
internacional (discurso en Wallstreet, Nueva York, octubre de 2008). No le<br>
duró demasiado. Cada semana crece la desocupación y la pobreza. Ya son más<br>
de 200.000 los despidos. Hoy hay 12 millones de pobres y 4 millones de<br>
indigentes. En un país que produce más de cien millones de toneladas de<br>
alimentos al año y tiene inmensas reservas ictícolas, mueren por<br>
desnutrición 8 chicos por día (La Nación, 10/12/08 y 03/02/09). El<br>
gobierno intenta ocultar estas cifras y mantiene la intervención del INDEC<br>
que ya lleva más de dos años. La baja del precio de las materias primas<br>
(granos, petróleo, minerales, etc.) agrava la crisis debido a la<br>
profundización del modelo agro-mineroexportador de los Kirchner.<br>
<br>
Poco tiempo después el gobierno tuvo que admitir que "el mundo nos<br>
complicó la vida a los argentinos" (discurso Cristina Kirchner, diciembre<br>
2008). Anunciaron medidas de impacto propagandístico, pero en los hechos<br>
buscan garantizarle el negocio a empresas y monopolios amigos y hacer caja<br>
para afrontar los pagos de la deuda externa y comprar voluntades ante las<br>
próximas elecciones. El gobierno de los Kirchner se ha convertido ya en el<br>
que más deuda externa pagó, y promete romper todos los records: en 2009<br>
pagaría aproximadamente U$S 16.000 millones. El aumento de las retenciones<br>
con la resolución 125 iba en este mismo sentido. El mismo Kirchner admitió<br>
que el proyecto de ley de retenciones móviles era "una herramienta fiscal<br>
que le sirve al país para cumplir con sus obligaciones externas" (Clarín,<br>
3/7/08). También manotearon la plata de las jubilaciones. La justa<br>
eliminación de las AFJP fue desvirtuada por el gobierno desviando los<br>
fondos previsionales para "hacer caja". Mientras, las jubilaciones y<br>
pensiones se retrasan cada vez más en la carrera contra la inflación. La<br>
obsesión de los K por la caja incluso puede otorgarle impunidad al lavado<br>
de dinero, a partir del proyecto de ley de blanqueo de fondos impulsado<br>
por el Ejecutivo.<br>
<br>
Al mismo tiempo el gobierno autorizó en plenas vacaciones el tarifazo en<br>
el transporte y los servicios (una vez más asegura las ganancias a las<br>
empresas y monopolios amigos, a la vez que aumenta su recaudación a través<br>
del IVA). La inflación carcome los salarios, con aumentos de hasta un 400%<br>
en las tarifas de servicios, de un 50% en el boleto de colectivo en el<br>
último año, ni hablar de los alquileres. Ir al supermercado puede<br>
transformarse en la peor pesadilla. Si a la inflación se le suma la<br>
recesión creciente, el cóctel es explosivo.<br>
<br>
¿Quién va a pagar la crisis?<br>
<br>
Esa es la pregunta que se hacen todos. Algunos buscan instalar la idea de<br>
que este año hay que ajustar gastos, no pedir aumentos salariales y<br>
agradecer si no se pierde el trabajo. Esta idea es funcional a aquellos<br>
que pretenden que el pueblo pague los platos rotos. Pero la crisis tiene<br>
causas políticas, sociales e históricas. Tiene responsables, que no son<br>
los trabajadores y el pueblo.<br>
<br>
Frente a los despidos y suspensiones ya se están desatando luchas muy<br>
importantes en el movimiento obrero. Los trabajadores de General Motors,<br>
con la toma de fábrica, impidieron los despidos y enfrentan el<br>
congelamiento salarial. Son un ejemplo. Los obreros de Parana Metal<br>
confluyeron con los chacareros en un corte "en defensa de sus puestos de<br>
trabajo, la producción y las economías regionales". Abrieron un camino de<br>
unidad popular que se multiplica, a través de las multisectoriales en<br>
decenas de localidades del interior.<br>
<br>
Están en lucha los docentes primarios y secundarios de muchas provincias.<br>
El reclamo salarial no sólo es justo desde el punto de vista del<br>
trabajador, sino que es un instrumento inmediato para enfrentar la crisis,<br>
ya que el aumento del poder adquisitivo de los asalariados desarrolla el<br>
mercado interno y reactiva la producción.<br>
<br>
Crece la bronca en grandes regiones del país. En el interior las asambleas<br>
de chacareros autoconvocados desbordan los intentos de acuerdo pergeñados<br>
por arriba entre la "Mesa de Enlace" y el gobierno. También en las grandes<br>
ciudades se multiplican las protestas de vecinos contra el tarifazo y se<br>
logró un amparo judicial contra los aumentos en la electricidad.<br>
<br>
El falso progresismo kirchnerista quedó al desnudo con sus alianzas en<br>
Catamarca (Saadi y Barrionuevo); al igual que el enorme deterioro del<br>
gobierno. Muchos senadores y diputados abandonan las filas del<br>
Kirchnerismo, que corre el riesgo de perder el quorum y la mayoría propia<br>
en el Congreso. La rosca política para el armado de las listas para las<br>
próximas elecciones pretende ilusionar con una salida a la crisis a través<br>
de las urnas. Pero octubre estaba muy lejos, y la crisis estalla ahora.<br>
<br>
La universidad pública en lucha junto a todo el pueblo<br>
<br>
La situación de la universidad pública es grave. A la UBA le otorgaron<br>
para 2009 un presupuesto equivalente a menos del 60% de lo solicitado. En<br>
la FCEyN pende la amenaza de una drástica reducción del financiamiento<br>
para funcionamiento y de su escisión del resto la UBA. La crisis impacta<br>
en la matrícula al reducirse el número de nuevos inscriptos, mientras<br>
aumenta la deserción de estudiantes avanzados. Durante 2008 los<br>
porcentajes de aumentos salariales (en cuotas) para becarios, docentes e<br>
investigadores fueron inferiores a los índices de la inflación real. Hoy<br>
un ayudante de primera con edicación exclusiva y retención de título cobra<br>
$2300. Un becario doctoral menos de $2800 (sin aguinaldo ni aporte<br>
jubilatorio). Mientras la canasta familiar trepa incesantemente por encima<br>
de los $4000.<br>
<br>
En este contexto resulta indispensable discutir en cada lugar de trabajo<br>
la necesidad de protagonizar un plan de lucha nacional de los docentes<br>
universitarios junto con los becarios de CyT para lograr urgentemente:<br>
<br>
1) Salario acorde a la canasta familiar ($4000)<br>
2) Contra la precarización: Plenos derechos laborales.<br>
3) Urgente aumento del presupuesto universitario.<br>
4) Unidad multisectorial para que la crisis la paguen sus verdaderos<br>
responsables.<br>
<font color="#888888"><br>
<br>
--<br>
conCienciaCrítica,<br>
Graduados/Docentes/Becarios de Ciencia y Técnica<br>
por otra Universidad, por otra Argentina.<br>
<br>
</font></blockquote></div><br><br clear="all"><br>-- <br>Dr Luciano Moffatt<br>Investigador Adjunto<br>INQUIMAE-CONICET<br>FCEN UBA <br>