[Todos] Aliaga y las patotas de la burocracia sindical

[El Transformador]

Abre una "investigación" y nos adelanta el resultado

ALIAGA Y LAS PATOTAS DE LA BUROCRACIA SINDICAL

  En un mail que envió a toda la facultad, utilizando el sistema de
inscripciones, el decano Aliaga lanza una nueva campaña  de macartismo y
persecución hacia el Centro de Estudiantes y las organizaciones
estudiantiles que plantean la necesaria democratización de la
Universidad sumando, esta vez, a la actual minoría de graduados.  En
esta oportunidad,  ataca con nombre y apellido a los consejeros que
presentaron un proyecto en la pasada Comisión de Interpretación y
Reglamento, entre los que se encuentra la consejera Lucía Maffey,
militante de El Transformador y el Partido Obrero.

  El proyecto que tanto irrita a Aliaga, solicita la apertura de una
“investigación tendiente a determinar a los responsables de las acciones
de violencia física, sobre los estudiantes, docentes y graduados que se
encontraban manifestándose en la sesión de Consejo Directivo donde se
elegían las futuras autoridades de la FCEyN”.

  Frente a nuestro proyecto, que planteaba discutir la apertura de una
investigación en el próximo Consejo Directivo, Aliaga anuncia que ha
decidido abrir un sumario de oficio. Esto impide dar una discusión
pública acerca de los términos en que se desarrolla la investigación y
la composición de la comisión investigadora. Lo que es más grave, Aliaga
ya “adelanta” el resultado de la misma, justificando el accionar de
estas mismas patotas de la burocracia sindical de APUBA en el 2006,
cuando golpearon brutalmente a un estudiante en la Facultad de Medicina.
 (http://www.pagina12.com.ar/diario/principal/index-2006-05-03.html).
Para Aliaga, mentimos cuando afirmamos que Apolonio, junto a otros
miembros de APUBA Exactas, se encontraban presentes en esa oportunidad y
que fue parte de la patota que golpeó al estudiante Nicolás Marrero.
Este hecho fue registrado en aquel momento por numerosos medios
audiovisuales y el propio Consejo Directivo lo dio como un hecho probado
dado que elevó pedidos de sumarios al rectorado de la UBA.

  Finalmente, Aliaga se presta muy generosamente a darnos una "lección
política" al acusar a la minoría de graduados de "Enlodar al colectivo
de los (trabajadores) no docentes". Sin embargo, Aliaga olvida mencionar
que uno de los considerandos del proyecto que presentamos dice
explícitamente "Que el accionar de estos grupos poco tiene que ver con
la gran mayoría de trabajadores no docentes de la UBA (...)". A
diferencia de Aliaga, nosotros no igualamos al colectivo de los
trabajadores no docentes con la burocracia sindical que oficia de patota
para las distintas camarillas universitarias. En efecto, creemos que la
gran mayoría de los no docentes no se siente identificada con estos
hechos de violencia ni está dispuesta a participar de los mismos.

  Cabe aclarar que su  argumento de que Apolonio ha sido electo Delegado
por sus compañeros (con lista única,) no disminuye un ápice  su
responsabilidad en los hechos de violencia que ocurrieron. La falacia de
que los burócratas sindicales son elegidos libremente por los
trabajadores y, por ende, no se los puede cuestionar, es un argumento
que sólo sirve para justificar el copamiento de los sindicatos por
aquellos que  jamás convocan a una medida de fuerza para defender los
derechos de los trabajadores, pero lo hacen presurosos cuando se trata
de atacar al movimiento estudiantil .

  Finalmente, Aliaga apela en forma canallesca al asesinato de nuestro
compañero Mariano Ferreyra para diferenciar a Pedraza de la burocracia
de APUBA y justificar su accionar. Este comportamiento resulta
contradictorio con las palabras del propio Aliaga en el Consejo
Directivo del 8-5-06, en el que repudiaba los hechos de violencia
acaecidos en Medicina "y en particular a la agresión que sufrió el
estudiante Marrero, a quien esa situación le podría haber costado la
vida". Por otra parte, parece que Aliaga nos se enteró de que nuestro
compañero Mariano Ferreyra fue asesinado por luchar contra de la
burocracia sindical, no por apañarla.

  No podemos más que celebrar  que nuestra iniciativa haya motivado la
apertura de una investigación pero rechazamos que se haya decretado
antes de poder ser discutida en el marco del Consejo Directivo y que
esté dirigida únicamente por un abogado que responde al decanato. 
Advertimos la contradicción que implica que quienes van a llevar
adelante la investigación son aquellos que convocaron a la patota de
APUBA a la elección. Si en general no se puede ser juez y parte, en este
caso menos aún ya que el decano abiertamente ha defendido el accionar de
la patota contra la movilización estudiantil previamente al inicio de la
investigación.

  Si bien consideramos necesaria la apertura de una investigación,
denunciamos que la gestión busca utilizar este sumario como una
herramienta para igualar a los estudiantes movilizados con quienes sólo
concurrieron con el objetivo de amedrentar a quienes se pronuncian por
la democratización de la universidad.  Reclamamos que la investigación
no quede únicamente en manos del decanato y proponemos la formación de
una comisión independiente de docentes y estudiantes que participe de la
investigación de estos hechos y nos comprometemos a aportar pruebas y
testimonios para terminar de una vez con las patotas en la Universidad.