[Todos] Jacovkis, la impunidad del jerarca

[fvicent en dm.uba.ar]

Ref: Jacovkis, el abuso de poder, 10/3/08

En inglés a la persona sin conciencia se la llama “moral idiot”. Un tal
individuo es aquel que no siente cargo de conciencia por matar o arruinar
la vida de otra persona. Ejemplos: Videla y Massera y Menem y Cavallo.
Todos tienen en común que son moral idiots que treparon al poder e
hicieron bestialidades. Además ninguno de ellos recibió el castigo que se
merece.

Llegué a los 65 años y me jubilaron. Estaba lúcido y sano y no acepté la
idea de sentarme en espera de que llegue la muerte. El depto de matemática
tiene una orientación aplicada, hay un 30% de alumnos interesados en tal
orientación y yo era el único matematico entre 55 que había trabajado
fuera de la academia. Era obvio que era útil a los alumnos. Quise seguir
enseñando y Jacovkis uso el fraude para impedirmelo. En la carta de la
referencia he explicado las motivaciones perversas de Jacovkis y la serie
de deshonestidades que usó para deshacerse de mi.

No puedo resignarme a que me haya arruinado los últimos años de mi vida
abusando de su poder como decano. Durante los pasados 5 años he denunciado
las acciones dolosas del sujeto a la justicia ordinaria y al tribunal
académico. Todo ha sido en vano. El tipo, encumbrado en el poder, es
impune a pesar que sus fechorías sean obvias.

Denuncie al ex decano al nuevo decano Aliaga. Lo acusé de acciones
fraudulentas con fundamentos, testigos y pruebas. Sin desmentir con
argumento alguno los cargos formulados, Aliaga rechazó mi acusación en
nombre del consejo directivo. Sospechando por la factura de la resolución
que ningún miembro del CD había leído los cargos de mi denuncia, me dirigí
a cada miembro del CD para que ratificara o rectificara la respuesta del
decano y ninguno respondió a mi pedido. Así de fácil, se hicieron todos
los burros los supuestos representantes de los profesores, cortesanos del
poder.

Por otra parte denuncié a Jacovkis repetidas veces ante todos mis colegas
y también se hicieron los burros. Por indiferencia actuaron los que no me
conocen y por cobardía aquellos que me conocen. Todos me hicieron a un
lado como si fuera loco. Una buena excusa para no hacer nada, la típica
falta de solidaridad del argentino, drogadicto del sistema.

De este episodio infiero tres principios políticos:
1) Los individuos que trepan al poder son hijos de puta.
2) El poder encubre a los canallas de su propia calaña.
3) La gente común es indiferente o cobarde ante el abuso del poder y esto
garantiza la impunidad del sistema infame.